Regreso a casa
Ha pasado mucho tiempo.
Abro lentamente la puerta y todo está a oscuras. Los lienzos blancos tapan los muebles protegiéndolos del polvo y el aire es pesado, como si se hubiese adueñado de todos los huecos y espacios vacíos y defendiese sus nuevas pertenencias ante cualquier invasión.
Paseo por la estancia, arrastrando los dedos sobre las superficies que me son tan familiares, y tan extrañas después de tanto tiempo.
Corro las cortinas para que la luz del sol inunde la casa y le devuelva la vida de que se ha visto privada tanto tiempo. Y suspiro, suspiro mirando a mi alrededor, preguntándome para cuanto tiempo vuelvo esta vez. Si para una escala fugaz, o para un largo periodo, recogido en casa, disfrutando de la calma y tratando de colocar en su sitio todas las aventuras del último año.
El tiempo dará las respuestas, como hace siempre, mientras tanto me limito a encender una pipa y tararear una canción de las de siempre.
Abro lentamente la puerta y todo está a oscuras. Los lienzos blancos tapan los muebles protegiéndolos del polvo y el aire es pesado, como si se hubiese adueñado de todos los huecos y espacios vacíos y defendiese sus nuevas pertenencias ante cualquier invasión.
Paseo por la estancia, arrastrando los dedos sobre las superficies que me son tan familiares, y tan extrañas después de tanto tiempo.
Corro las cortinas para que la luz del sol inunde la casa y le devuelva la vida de que se ha visto privada tanto tiempo. Y suspiro, suspiro mirando a mi alrededor, preguntándome para cuanto tiempo vuelvo esta vez. Si para una escala fugaz, o para un largo periodo, recogido en casa, disfrutando de la calma y tratando de colocar en su sitio todas las aventuras del último año.
El tiempo dará las respuestas, como hace siempre, mientras tanto me limito a encender una pipa y tararear una canción de las de siempre.