Se desliza suavemente bajo el casco. El viento, gentil, ensancha las velas y el aroma a mar inunda mis pulmones.
No se puede hacer balance, no hay Sirena o calamares gigantes, tampoco corsarios o islas del tesoro. Solo callo en las manos, salitre en el pelo, moreno en el rostro y luz en el alma.
Bendición y maldición de marino, no tener más nudos que los de las escotas.
No se puede hacer balance, no hay Sirena o calamares gigantes, tampoco corsarios o islas del tesoro. Solo callo en las manos, salitre en el pelo, moreno en el rostro y luz en el alma.
Bendición y maldición de marino, no tener más nudos que los de las escotas.
Anotado por Amhailt a las 7:43 p. m.
9 Comments:
Yo, que soy un poco malpensada, había leído escotes, en lugar de escotas y es que teniendo en cuenta que ya es primavera no me extrañaba demasiado ese comentario ;)
Me alegra volver a leerte, chiquitín. Te quiero mucho!!
Hola capitán, creí que habías dejado de escribir. Veo que finalmente no te has dejado arrastrar por ninguna sirena.
La soledad del Capitán... es un buen titulo para un libro, inventa un final.
Un abrazo enorme
Y luz en el alma... Si lo que nos queda es luz en el alma, ¿qué más se puede pedir?
Vaya Capitán! Parece que nuestras mutuas limpiezas de primavera nos hacen, al menos, activarnos un poco y retomar así viejas costumbres.
Te cuento un secreto? (aunque se que tu ya lo sabes) Se porque no "pescaste" a la Sirena... porque las Sirenas no existen, como no existen los Heroes, como no existe más que aquello que es natural y palpable. La busqueda de lo mágico e intentar convertir algo humano en magia es el mejor camino para perderse.
Si no buscamos magia, encontraremos sencillos tesoros. Así nos daremos cuenta de que la soledad no existe.
Tu eres un gran tesoro que yo encontré sin buscar. Y gracias a eso tu ahora tienes a una amiga "deficiente", ves? muy humano, jejeje
La última vez que nos vimos, mientras subías a tu nave para partir, me dijiste, refiriéndote a mi agotadora batalla perdida, que al menos uno se siente vivo... Quizá es así. Pero desgasta tanto que a veces también se envidia esa falta de ataduras, y a pesar de sus contrapartidas, saber que el horizonte espera, y solo depende de uno.
Brindemos por el viaje y por tu regreso.
Creo que hagas lo que hagas en cierto s luegares siempre se está solo. Las compañias de calamares y sirenas sólo consiguen distraerte de poder ver con mas claridad el amanecer.
Cada capitan tiene su dama para salvar, sólo hay que saber en que puerto atracar...
Un beso
Yo es que aún creo en Sirenas y Héroes aunque a veces sean tan difíciles de encontrar o de ver (a veces están tan cerca...) Sigue navegando con los ojos bien abiertos y siempre con esa luz en el alma.
Me alegro de leerte.
Capitán:
Después de mi periplo por cálidos mares repletos de corsarios y piratas, y llenas mis sentinas del amable ron caribeño, me es grato contemplar su pabellón por estas aguas. Sepa vuesa merced que me encuentra a día de navegación, a una señal suya largo velas y compartimos botín. Loor y gloria.
Estoy hasta los mismisimos de la gente que entra en los blogs a hacer puñetera publicidad. Que paguen una agencia, coño.
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